La policía hackeó una plataforma de mensajería “segura” para espiar delincuentes

La policía holandesa anunció el viernes que desmanteló la plataforma de comunicaciones cifradas Exclu. Esto ocurrió después de hackear el servicio para monitorear las actividades de las organizaciones criminales.

La operación consistió en dos investigaciones separadas que comenzaron en septiembre de 2020 y abril de 2022. En ese momento, la policía también llevó a cabo 79 registros selectivos en los Países Bajos, Alemania y Bélgica y arrestó a 42 personas.

Eurojust, Europol y las fuerzas policiales de Italia, Suecia, Francia y Alemania ayudaron en las operaciones de aplicación de la ley.

Arrestos

Dos de los detenidos son presuntamente los propietarios y administradores de la plataforma de telecomunicaciones cifradas. Los 40 restantes eran usuarios del servicio Exclu, incluidos operadores de laboratorios de drogas que tenían cantidades significativas de estupefacientes, armas de fuego y más de 4 millones de euros en efectivo.

Solo en los Países Bajos, la policía registró 22 lugares y arrestó a 11 personas que se cree que están conectadas con la plataforma Exclu.

La policía holandesa dice que ha utilizado su experiencia en tecnología y delitos cibernéticos para hackear el servicio Exclu, identificar a sus usuarios y, finalmente, desmantelar su infraestructura.

Exclu vendía suscripciones de usuario de seis meses por 800 euros, lo que permitía a los usuarios intercambiar mensajes y archivos multimedia encriptados (grabaciones de voz, videos, imágenes). La  policía menciona  que la aplicación tenía aproximadamente 3000 usuarios, 750 con sede en los Países Bajos.

“Nuestra aplicación tiene múltiples casos de uso. Úsalo para chat cifrado o comunicación por correo y almacena tus archivos y notas localmente en la bóveda encriptada y compartimentada. Nuestra plataforma de comunicación ha integrado los protocolos de cifrado más sofisticados del mundo para garantizar que nadie tenga acceso a tus datos”.

Sitio web de Exclu

Las autoridades ahora poseen todos los datos de comunicación, que están utilizando para continuar con sus investigaciones. Esto puede conducir al descubrimiento de actividades ilegales adicionales y proporcionar evidencia para respaldar los cargos presentados contra los sospechosos.

Sin embargo, un segmento de la base de usuarios de Exclu está formado por profesionales en campos sensibles, como abogados, investigadores, notarios y médicos, para quienes la privacidad es fundamental. Las autoridades han exhortado a estas personas a ponerse en contacto con la policía y solicitar la eliminación de sus datos de los servidores incautados.

Algunas personas usan estas oscuras plataformas de comunicación en lugar de los populares productos cifrados de extremo a extremo como Signal porque prometen una confidencialidad extrema y múltiples capas de encriptación y seguridad.

Además, es menos probable que los servicios de criptoteléfonos menos conocidos como Exclu sean detectados y atacados por las autoridades policiales, lo que permite que su existencia permanezca en secreto para el público en general durante años.

Casos similares

Un caso notable de desmantelamiento de una plataforma criptográfica similar fue el de  EncroChat en julio de 2022. En aquel suceso, varias fuerzas policiales europeas colaboraron para desmantelar el servicio y usar los datos incautados para identificar a los delincuentes.

EncroChat contaba con más de 60000 usuarios en todo el mundo y vendía suscripciones por 1500 euros por seis meses mientras brindaba atención al cliente las 24 horas, los 7 días de la semana.

El FBI y la Policía Federal Australiana también crearon una  plataforma falsa de chat cifrado de extremo a extremo llamada ANOM. La plataforma permitió a las fuerzas del orden monitorear las actividades de los grupos criminales. Esto finalmente condujo al arresto de 800 personas.

La industria de los teléfonos cifrados está profundamente entrelazada con el crimen organizado. En ocasiones, como se ha revelado anteriormente, las empresas son creadas y dirigidas por narcotraficantes. En otros casos, las empresas comienzan como negocios legítimos antes de servir deliberadamente al mercado criminal. Por ejemplo, en 2018, el FBI arrestó a Vincent Ramos, director ejecutivo de una empresa llamada Phantom Secure, luego de una investigación en la que Ramos sugirió a agentes encubiertos que se hacían pasar por narcotraficantes que había fabricado el producto para su línea de trabajo.

La noticia demuestra que los organismos encargados de hacer cumplir la ley continúan atacando esta industria, parte de la cual ha servido a los sindicatos del crimen organizado durante años. La policía holandesa específicamente ha estado detrás de muchos de estos ataques y cierres, trabajando en otras investigaciones sobre empresas como Ennetcom y Sky.