El FBI desbloqueó el iPhone 11 usando GrayKey
Un informe reciente de Forbes afirma que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) pudo extraer datos del iPhone 11 Pro Max. Este IPhone es considerado el más seguro y supuestamente fue vulnerado utilizando una de las herramientas del mercado negro/gris.
Según el informe, los investigadores del FBI en Ohio utilizaron un dispositivo de hacking de terceros llamado GrayKey para extraer datos de un iPhone 11 bloqueado.
El teléfono en cuestión pertenecía a Baris Ali Koch. Este es acusado de ayudar a su hermano condenado por delitos de odio a escapar del país utilizando su pasaporte y mintiendo a las autoridades. Actualmente está esperando sentencia.
Como parte de la investigación, las autoridades del FBI decomisaron el iPhone 11 Pro Max de Koch el 11 de octubre de 2019. Según su abogado, Ameer Mabjis, estaba bloqueado y protegido por un código de acceso. Según Mabjis, no se brindó la contraseña a las autoridades. Tampoco se obligó a Koch a usar su rostro para desbloquear el teléfono a través de Face ID.
Una orden de allanamiento presentada el 30 de octubre de 2019 revela que el FBI tenía una unidad USB en su poder. Esta contenía un “análisis forense derivado de GrayKey” del iPhone en cuestión.
Por si aún no lo sabes, GrayKey es una herramienta de desbloqueo de iPhone creada por la firma Grayshift, con sede en Atlanta. Esta ayuda a las agencias policiales de todo el mundo a descifrar contraseñas en iPhones involucrados en investigaciones criminales con el propósito de extraer datos.
Aunque no se menciona en la orden de búsqueda del 30 de octubre de 2019, el informe sugiere que el FBI tuvo acceso a GrayKey. Según los informes se utilizó para desbloquear el iPhone 11 Pro Max de Koch.
El FBI presiona a Apple para desbloquear iPhones
El FBI quería que Apple desbloqueara el iPhone 5 y iPhone 7, que pertenecían al atacante de la Base Naval de Pensacola, Mohammed Saeed Alshamrani. Este mató a tres marinos e hirió a otros antes de ser derribado por un oficial. Ambos iPhones, que no están protegidos como los iPhones actuales, se pueden desbloquear con cajas de hardware como GrayKey.
Cuando el FBI se acercó a Apple para desbloquearlos, el fabricante de iPhone se negó a desbloquear los iPhones. La compañía alegó que la acción era contraria a las políticas de la empresa y crearía problemas de desconfianza entre todos los usuarios de Apple. Sin embargo, el gigante tecnológico proporcionó al FBI una amplia variedad de información relacionada con los iPhones. Asimismo, entregó copias de seguridad de iCloud vinculadas, información de cuenta y datos transaccionales para varias cuentas.
En el pasado, el FBI ya hizo uso de un servicio de terceros para desbloquear un iPhone 5C utilizado por el asesino de San Bernardino en 2015. Y con el reciente informe del FBI, está claro que el FBI puede desbloquear iPhones por ellos mismos usando GrayKey.
Por lo tanto, es sorprendente el por qué el FBI está presionando a Apple para crear una puerta trasera para el cifrado en iPhones.
Donald Trump
El presidente Donald Trump incluso tuiteó cómo, a pesar de que Estados Unidos ayuda a Apple en “Comercio”. Apple se niega “a desbloquear teléfonos utilizados por asesinos, traficantes de drogas y otros elementos criminales violentos”.
El fiscal general William Barr también acusó a Apple por negarse a ayudar a desbloquear los dispositivos. Barr ordenó que Apple encontrara una manera de descifrar los iPhones cifrados utilizados por el sospechoso del ataque de Pensacola.
“Es muy importante para nosotros saber con quién y sobre qué se comunicaba el tirador antes de morir”, afirmó Barr el lunes.
Respuesta de Apple
En respuesta a las acusaciones, Apple dijo: “nuestras respuestas a (los gobiernos federales) solicitudes desde el ataque han sido oportunas, exhaustivas y están en curso.
Además, la compañía afirma: “Tenemos el mayor respeto por la aplicación de la ley y siempre hemos trabajado cooperativamente para ayudar en sus investigaciones. Cuando el FBI nos solicitó información relacionada con este caso hace un mes, les dimos todos los datos que tenemos en nuestro poder. Además, continuaremos apoyándolos con los datos que tenemos disponibles.
“Respondimos a cada solicitud con prontitud, a menudo en cuestión de horas, compartiendo información con las oficinas del FBI en Jacksonville, Pensacola y Nueva York. Las peticiones resultaron en muchos gigabytes de información que entregamos a los investigadores. En cada caso, respondimos con toda la información que teníamos”.